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EL DENGUE-DENGUE Y EL NECESARIO FIN DE UNA EPOCA

EL DENGUE-DENGUE Y EL NECESARIO FIN DE UNA EPOCA
  • Dengue-dengue en realidad es la forma cómo administra la ciudad el aparato encaramado en la alcaldía para servir intereses de empresarios cívico logieros, una forma irrespetuosa y prepotente que grotescamente retrata el alcalde Percy Fernández. Pero su agotamiento es visible haciéndose insoportable y vergonzosa para los ciudadanos.
  • Hace rato que los medios de comunicación se encuentran en una relación sospechosa con el poder municipal encumbrando o defenestrando alcaldes de acuerdo a su conveniencia.

 

(ASC – Noticias) 14 – marzo - 2009

 

Por Raúl Bustamante

 

El alcalde municipal Percy Fernández, personaje que unas veces es un payaso y otras un intolerante, de nuevo sorprendió a Santa Cruz y al país con otra de sus ocurrencias, pero esta vez de mayor calibre, y eso fue el maltrato fuera de lugar a la periodista de Unitel Marcia Cedeño que le hizo una pregunta sobre la epidemia de dengue que lo sacó de las casillas respondiéndole con ataques duros, intentando expulsarla del local y en cierto momento ya desquiciado lanzando insultos y expresiones grotescas y cómicas como “cara de dengue” y “dengue, dengue, dengue, prrrrr” que ahora son de antología. Producto de esto, la opinión casi unánime de la gente se volvió en su contra. Muchos medios hicieron pasto de Percy tanto que lo compararon con Evo Morales, el prototipo negativo según ellos, que la vez pasada trató mal a un periodista de La Razón. Pero también queda afectada la imagen de la ciudad Santa Cruz, que cada vez es más claro la dirige un individuo desequilibrado.

 

Es singular el hecho de que ninguno de los presentes fue lo suficientemente valiente y digno para decir “!basta!” y pararle el coche. Hay que entender que eso no es posible porque eran empleados de Percy, gente atrapada por una pega que si habla se va de patitas a la calle, por eso, ante las acciones fuera de lugar de su patrón, alguno se tapó la cara como diciendo “trágame tierra”, luego alguna sonrisas nerviosas pero nada más. En tanto que los periodistas, que fueron agredidos en la persona de la Cedeño, parecen haber quedado shockeados o no tuvieron la personalidad suficiente como para defender a la agredida, de ese modo ninguno se hizo respetar.

 

La gente trata de entender qué pasa. Una parte cree que Percy está chiflado, que deben hacerle chequeos psiquiátricos, que debe ser sustituido, etc. Dirigentes de los periodistas en esa misma tónica, acusándole de violentar la libertad de expresión, de calumnias e injurias, le han iniciado juicio y exigen que el Concejo lo procese en la Comisión de Ética. Si prospera el caso, cosa difícil, apenas le darán una palmadita en el trasero diciéndole “malo, malo…”. No se puede esperar más de un Concejo de alcahuetes dominado por el acuerdo MAS – MNR basado en el reparto de granjerías. Si el caso llegara a mayores tampoco habrá un terremoto pues el sustituto de Percy será Quique Landivar, cerebro gris detrás del “loco” y seguro candidato a alcalde que es principalmente el que garantizará que el aparato que se mueve con Percy se mantenga incólume.

 

Pero la imagen del alcalde hace rato que está por los suelos y sus acólitos no saben cómo sacarla a flote o tal vez están tan locos como él. El alcalde virtualmente es un alcalde clandestino porque no comparte con el pueblo, rara vez se lo ve, se encuentra aislado. Se ha construido unas instalaciones especiales en la zona de Los Mangales de donde no sale porque tiene miedo y ojeriza a todo. Hace tiempo que sus relaciones con la prensa son muy malas, se queja de las críticas y hace escándalo ante quienes curiosamente eran sus aliados, los canales 13 y 9, y también ante el canal 57, de sus rivales los Fernández de UCS. A veces en forma irónica dice que “la prensa tiene siempre la razón”, que “son unos intocables” y otras expresiones sarcásticas que pueden ser graciosas hasta cierto punto y se constituyen en una forma de distracción al pueblo de los graves problemas de la ciudad. Lo curioso es que la población, que siente malestar por las reacciones desubicadas de semejante autoridad, parece encontrarse inerme sin poder protestar organizadamente, eso porque en realidad las organizaciones sociales están destruidas, captadas por el campo gravitatorio de las logias o el gobierno que las ponen a funcionar como parte de sus disputas dejando los intereses de la población a un lado. Ni que decir de los instrumentos de la “participación popular” Los canallas que lanzan loas a esta política aún se atreven a hacerlo pese a que en el municipio cruceño el Consejo de Vigilancia está prácticamente neutralizado y sus directivos no dicen ni chis ni mus ante los problemas del municipio. Lógico están comprados, corrompidos. La participación popular resultó solamente la ampliación, la “popularización”, de la corrupción.

 

Stelzer, concejal adenista, dijo acertadamente en una ocasión que “en el municipio nada está bien excepto el cemento”. La virtud de esta afirmación es que demuestra que esta gestión no está preocupada del problema integral de la ciudad y sus vecinos, y que considera más importante las “obras”, el cemento frío que los problemas sociales. Esto porque detrás de las obras están pues sus padrinos, los empresarios que lo encumbraron y que cobran su inversión recibiendo contratos. Esta política de cemento, insensible con los intereses de los vecinos, significa reproducir la forma de actuar de los grupos de poder y los politiqueros, todo en la oscuridad, entre los fraternos, nada de control, pero sí mucha propaganda acerca de cómo quieren a Santa Cruz sus autoridades. Esta actitud de irrespeto, de burla, de payaso, es la forma como esta gente considera al pueblo cruceño. El dengue-dengue de las logias, el sacarle la lengua a la gente, el acosarla para que no ejerza sus derechos es lo que debe pararse. Toda una época de engaño y burla al pueblo ¿podrá continuar más tiempo?

 

¿Están los medios y los periodistas en relaciones incompatibles con el poder?

 

Sin embargo el que Marcia Cedeño haya llevado al alcalde a una situación “border” ha logrado mostrar que el problema parece tener raíces más profundas y que aparentemente hay una relación oscura, de chantaje, entre los medios y la autoridad municipal.

 

El analista de televisión, Carlos Valverde, reveló que en realidad Marcia Cedeño venía tratando de conseguir un puesto en la Alcaldía para un pariente pero que no habría recibido respuesta favorable y que por eso comenzó a presionar al alcalde hasta hacerlo reventar, cosa por lo visto muy fácil con quien es preso de su debilidad de carácter. Pero también hay quien afirma que medios de comunicación televisivos como Red Uno, Unitel, Sittel, etc., con amplios intereses empresariales en supermercados, comercio, construcción, etc., son lo que verdaderamente viven presionando al alcalde buscando silenciosamente que su gente de confianza se incorpore a la planta de empleados del municipio para que desde dentro proteja sus intereses. Este es el fenómeno más grave y serio que se está desarrollando en las narices de la gente y que nadie se da cuenta, pero que comenzó desde que de manera cínica los medios han incursionado en política hasta con candidatos propios, echando sombras sobre los otros.

 

Todo esto no sería raro pues un vacío legal permite que empresarios con intereses en otros rubros sean también propietarios de medios de comunicación, sirviendo más a sus negocios que a la verdad y la información. Así en realidad estamos ante la persistente acción de medios inescrupulosos convertidos en instrumento de sus dueños para tomar el control de la cosa pública.

 

Por lo pronto una poderosa campaña está en marcha desde “El Mundo” y otros medios de prensa, secundada por Yoyo Pando, el dirigente de la COD Edwin Fernández y otros ultras pro logieros y pro emenerristas que con armas en ristre se lanzan sobre Hernán Cabrera, dirigente de los periodistas, que exige al alcalde que responda ante la justicia por los atropellos cometidos. Los defensores oficiosos de Percy levantan el dedo acusatorio acusándolo de ser masista para excomulgarlo.

 

No todo es tan serio en esto, porque en medio de la crisis de salud por el dengue y de la nulidad de autoridades que tiene Santa Cruz, Percy sin quererlo ha logrado dar impulso a una ola musical en base a sus letras, el llamado dengueton que va repitiendo en todo lado “cara de dengue… dengue, dengue, dengue”.

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